-¿Ves aquella carretilla? ¡Pues hagamos una apuesta! Mira, elige cualquier cosa de lo que hay aquí para cargarla, te apuesto $5,000 a que soy capaz de ir hasta la esquina y volver más rápido de lo que lo haces tú con ella. Incluso te doy ventaja, le añadiré este saco de cemento de 50kg a la carga que lleves tú.
El otro hombre, también fuerte por los oficios de la construcción, pero no tanto como su compañero, sabe que perderá la apuesta si se resuelve por trabajo físico, pues los 50kg de carga extra de su contrincante no es suficiente compensacion. Sin embargo, el ingenio lo hace aceptar la apuesta para ganarla con seguridad.
-¡Elige la carga , entonces!
En la construcción donde estaban había:
El saco de cemento de 50kg
Varios sacos de arena de 30kg
Cuatro palas y cuatro cucharas
Una viga de hierro de 100kg
Una soga
Un montón de ladrillos
Además de ellos dos, cuatro albañiles que almorzaban junto a ellos
¿Qué dijo entonces el trabajador menos fuerte para poder ganar la apuesta?
El albañil débil escogió como carga al albañil fuerte.
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